En 1985, Combat Records le dio a Megadeth $ 8,000 por su álbum debut Killing Is My Business... And Business Is Good! grabaciones, pero la orquesta tuvo que despedir a su productor antes de tiempo, ya que el dinero ya se había acabado en licor y drogas.
El exbajista David Ellefson dice en una entrevista con el podcast The SDR Show que todavía puede “escuchar de qué color era la cocaína” en varios puntos del álbum.
“Fue realmente divertido tocar en el estudio con él, porque puedo decirte que cada vez que escucho [Killing Is My Business… and Business Is Good!], escucho, ‘Ok, huele la fila larga, ¡huele! "Está bien, Rattlehead, volvamos", dice Ellefson.
“Luego, cuando hubo un descanso, recuerdo que realmente necesitaba un descanso, nos vimos con Dave y [el baterista Gar Samuelson] - [bofetadas] ‘¡Oh, mierda! ¡Ese tempo es mucho más rápido de lo esperado!'”, recuerda el hombre. "¡Todavía puedo escuchar de qué color era el polvo que inhalamos en los cambios de tempo!"
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